jueves, 18 de abril de 2013

ANTES Y DESPUÉS...

UN RELATO DE MANUEL NÚÑEZ AMADOR


“ ANTES Y DESPUES “







...... Antes ....
¡Vaya lata ésta de estar aquí dentro. Ya va siendo hora de salir¡. ¿Pero me gustará ese nuevo mundo, o en cambio será algo espantoso?.

-         En realidad me pregunto de nuevo, ¿quién me ha pedido permiso de si yo quiero nacer o no?. Ya que no lo han hecho intentaremos pasarlo lo mejor posible.

¿Y cómo estarán mis padres?, porque me imagino que ellos estarán contentos con mi venida; lo triste es que fuera lo contrario, pues, si no lo están que se aguanten, que yo no he dicho esta boca es mía.

Ya estoy harto de tanta oscuridad y de estar encogido, y eso que no dejo de dar vueltas y soltar patadas, pero ¡nada¡, parece que no me escuchan que no quieren que salga, pronto van a ponerme obstáculos y  eso que aún no he nacido; pues menuda lata, como todo sea así ahí fuera, mejor será que siga aquí dentro, aunque no estoy convencido del todo de esto. Porque si así es la realidad, será necesario que nazca y empiece a luchar para destruir cadenas con idea de los que nazcan después tengan menos obstáculos.

Ahí va otra patada, ¡pero nada¡, que no me dejan salir, esto es inaguantable; y son ya nueve meses así. ¡Pobre mamá, cuanto estará pasando, con este peso y con mis cosas¡.

Pero ¿qué ocurre ahora?, ¡ah, sí ¡, parece que me llaman, pero de dónde viene esa voz. Ah sí ya sé de donde, se ve una pequeña claridad, pues para allá voy, creo que ya es la hora de salir, ánimo, hay que ser valiente o si no aquí te quedas para siempre, y lo que es peor, sin saber lo que hay fuera, aunque a lo mejor lo más bueno sería no conocerlo.



.... y después.....





¡Oh, qué cansado estoy y qué frío, mira que meterme en agua, que aunque estaba caliente ....¡. ¡Vaya susto que me ha dado esa gorda¡. ¡Como esa sea mi madre no la voy a querer desde luego, porque antes, encima, tuvo el valor de darme unos golpes en el trasero, ¡claro y como uno no es de piedra pues a llorar¡.

No, creo que esa no es mi madre, debe ser la que está echada en una cosa blanca, la pobre tiene cara de cansancio, pero la veo contenta. Sí la tengo que querer porque tiene algo en sus ojos que me lo dice, y además es muy guapa.

Bueno, ya es hora de que me vistiera, porque ya no aguantaba más el frío. Me llevan con mamá, y me da de beber de sus senos, y me da besos. ¡Que alegría¡, si la realidad es así, vale la pena haber nacido.

¡Oh, no puedo más con el cansancio después del largo viaje que he realizado¡. ¡Me muero de sueño¡.

Bueno ahora a descansar y espero que al despertar tenga el mismo concepto de la vida, que no me encuentre rodeado por el odio, la mentira ......

Los Palacios 4 de Marzo de 1978

Autor:Manuel Núñez Amador. 


1 comentario:

Tatiana Aguilera dijo...

Hermoso lo que has escrito. Me recuerda el nacimiento de los míos.
Un abrazo.